EX-traño, si, extraño. Estos días siempre hacían que mi rostro sonriera más de lo normal, que mis gestos fueran mucho más que [MUYexpresivos], que los abrazos fluyan con más facilidad (a veces creo que hasta eran petulantes, pero hace mucho mucho tempo), y hasta llegar a mi casa, todo era perfecto.
Normal, si, normal. Este día hizo que mi rostro se fundiera en la nada, mis gestos se ahogaron en un mar de dudas que sólo supieron fluir en su momento y a una hora determinada, que los abrazos... no hubieron abrazos mejores que los de mañana; la llegada a casa fue más reconfortante, aunque esté sol-a.
Caminaba y creaba una historia en que un ser se ahogaba en las penumbras, leía y me ahogaba yo al mismo tiempo. Darse cuenta que los libros narran cosas exactamentes iguales a tu mundo, a tu vida y a tu psique. Darse cuenta que los días nublados en verdad dan pena y no alegría como simulaba antes. Darse cuenta que todo es objetivo, que las cosas pasan porque tienen que pasar, TÚ sientes porque tienes que sentir, eres porque debes concretar una personalidad y a la vez concretar este proceso de aprendizaje que vivimos en este universo, nuestro universo. Las cosas en la litósfera (aunque suene muy nerd) depende de la manera en que las mire un FA# o un MI, depende con qué OJOS las miremos, ¿podemos divagar en nuestra mente un ratito?, ¿tener más conciencia de lo que realmente nos pesa en el mundo?, ¿podemos crear y concretar de alguna vez y parar de soñar?: no sé, porque la sociedad nos cohibe, nos agobia, pero no quiero dar el brazo a torcer.
Ahora, hoy, Agosto, último día.