baban

En aquellos días, la señora que siempre regaba el patio a la misma hora dejó de hacerlo, el auto siempre allí estacionado, ya no estaba dejando un gran vacío dentro de lo que ya estábamos acostumbrados, encontramos todo más amplio, obviamente era todo fuera de lo habitual. Necesitábamos saber que pasaba, las personas actuaban diferente, las situaciones eran distintas y las sensaciones se vivían con distinta intensidad... hasta los colores eran particulares, se iba el eclecticismo en todo y llegaba algo hermosamente fijo, es inevitable sentirlo de otra forma.
Sensación, sentimiento, sensibilidad... ¿sentencia?. ¿Y si no nos regimos por las reglas actuales?, aquellas reglas son un motivo más para callar, para no comprender (pero entender) y seguir un paso forzado. Conceptos erróneos, morbosidad, nadie sabe, todos copian. Creo que esto ya empezó a hacer mucho efecto... conceptos del bien y el mal, creer o no creer, se nota gente, se nota.
Habitual... la costumbre y la soledad se van de la mano, me perturbaban, ahora ya son parte de mí. Se entiende tanto, se intenta comprender mucho, tanto así que cambiaron todas las percepciones, te lo juro.