ESTOY.

¿Enferma?, no lo creo, aunque la madre dice "tapate bien tapada, para que así te dé calor y se te pase la gripe" y mientras la tapa se le cae una triste lágrima del ojo izquierdo el cual estaba cargado al lado de la cama, y la madre le pregunta "¿Qué te pasa?, ¿Me escondes algo?, ¿Estás mal por algo que no me quieras decir?", ella le dico con el habla tan normal, solo que lo anormal en su era que su rostro estaba mojado ahora llorando por los ambos ojos, "Nada, no me pasa nada, solo es la gripe", y en ese momento llaman por teléfono y el hermano contesta y por lo que alcanzó a escuchar es "¿Aló?, ¡Wena Wena!, ¿cómo estay?" y me dijo que era una de sus más buenas amigas que necesitaba saber cuando era la prueba de Historia, le dijo que el martes 02 de Octubre entre sollozos, que contar que lloraba muy fuerte ahora no le daría miedo contarlo, por que quería ser, de ahora en adelante alguien completamente neutral. Después de eso, la madre le preguntaba que cuál y como podía tener ese afán de no contarle sus cosas a casi nadie, porqué la niña se las guardaba, y le dijo simplemente: "No quiero confiar en nadie mamá", la madre muy preocupada le contestó "¿Y confías en mí?" la Niña muy apenada poniendo como pretexto su gripe le dijo "Yo si en tí", quedándose dormida entre lágrimas, dolor de cabeza, de cuerpo... sentía que la fuerza de gravedad estaba muy a su favor, no podía levantar sus extremidades y sin alguna razón, algo le pasaba. Despertó un poco más tarde, entre escalofríos se dirigió a ordenar sus cuadernos para el día de mañana, para ir a la escuela, su madre le dijo "Anda a acostarte, tu mañana no vas al colegio", pero esta quería ir, así que algo amurrada se fue a la cama y su hermano la fue a ver, esta niña le dijo a su hermano mayor "Estoy aburrida aquí, sin nada que hacer, nunca me ha gustado estar enferma" y el niño que contesta entra algunas risas "Pucha, ¿te duele la cabeza?", ella le dise "sí.", luego le pregunta "¿Te duele el cuerpo?" ella responde "sí." y el hermano le vuelve a preguntar "Tienes los labios partidos?" y la Niña le responde "sí, muy partidos.", así que el hermano fue a buscar un bálsamo para labios y le hechó, buscó en la cocina un vaso con agua y le dió una pastilla para el incontrolable dolor de cabeza.
Al otro día, se despertó a las 9:20, inmediatamente pensando en que les faltaban 10 minutos a sus compañeras para salir a recreo, quizás que habían hecho en el colegio, y ella quería saberlo. La mamá le dijo que se levantara para que se sintiera mejor, y la hija sin duda se sentía con más ánimos que el día de ayer, así que ahora ya no tiene las mismas pataletas de ayer por que le resultó todo mal, supo cosas que ni siquiera ella quería saber, sólo quería a sus amigos, dijo cosas sin sentido mientras dormía entre sollozos, me sentía completamente mal y enferma.